Verval es el nombre artístico de Carlos Díaz Sánchez. Técnico de sonido, Teclista, guitarrista, bouzoukista y con formación en instrumentos tradicionales como la gaita asturiana e instrumentos de percusión, Carlos es el núcleo de la composición en Xera.
Sus principales fuentes de inspiración sintonizaban inicialmente con músicos como Vangelis y Jean Michel Jarre, pero rápidamente se vio influenciado por las nuevas corrientes de la música electrónica en los inicios de los años 90 (Depeche Mode, Nine Inch Nine, Bjor, etc). Más tarde, Carlos entró en contacto con el mundo de la música folk asturiana y comenzó a interesarse por nuevos sonidos. Es entonces cuando conoce el trabajo de Martyn Bennett y Paul Mounsey. Desde el año 2000, Carlos comenzó a investigar la posibilidad de fusionar el sonido electrónico y el tradicional con un carácter industrial y a su vez sinfónico. Sería en 2003, de la mano de Flavia, cuando compondría el primer tema musical, “Ñubes”, que sentaría las bases de lo que sería la música de Xera.

Flavia es el nombre artístico de Iria Rodríguez Álvarez, conocida también como Iria Flavia. Violinista, zanfonista y rabelista, Flavia constituye la segunda línea de composición, arreglos y producción en Xera.
Sus fuentes de inspiración parten del origen de la escena independiente de la música electrónica de los 90, con artistas como Björ o Garbage, y se mezclan con corrientes clásicas contemporáneas como Philip Glass. Flavia entra en contacto con la escena folk en el año 2002 y se ve influenciada por los trabajos de Martyn Bennett y Hedningarna. Desde entonces, ha dedicado gran parte de su tiempo a indagar nuevas formas de explotar tanto el violín como la zanfona y el rabel, así como a las posibilidades de puesta en escena de instrumentos antiguos con el uso del looper, por ejemplo.